domingo, 24 de mayo de 2009

¿Perdimos "poyeya"?


Un año más España no gana Eurovisión. Desde 1969, y gracias a la pegadiza “Vivo cantando” de Salomé, nuestro país no se alza con el primer premio de este concurso europeo de la canción. Pero nuestra Salomé tuvo que compartir su momento de gloria con Reino Unido, Holanda y Francia, ya que por primera vez en la historia de Eurovisión se producía un empate por el primer puesto. Cuatro décadas después, Soraya Arnelas lleva a España al puesto número veintitrés de veinticuatro países que participaban.

La extremeña luchó contra Melody, la adolescente de los gorilas, por ser nuestra representante. Si a esta última no le hubieran abandonado Los Vivanco quizá habría tenido más oportunidades, pero ella sola no pudo contra el torbellino Soraya.

Los sondeos previos a Eurovisión hacían prever un buen resultado para España. Soraya fue a Moscú sabiendo que no ganaría, pero seguro que tampoco contaba quedar en penúltima posición. Su canción, que lleva por título “La noche es para mí” pronosticaba una velada de éxitos y alegría para la joven, pero algo falló.

Soraya salió al escenario rodeada de bailarines, luciendo un atuendo que era más una mezcla de pareo y traje de patinadora que un vestido propio de una gala de tales características.

El hecho de que fuese la última participante del concurso hizo creer que ibamos a tener más suerte que años anteriores. Craso error. La actuación de Soraya supuso uno de los peores puestos conseguidos en el Festival de los últimos diez años, sólo superado por los 18 puntos de las Ketchup y Serafín Zubiri.

La actuación nada tuvo que envidiar al resto de los participantes. La canción era pegadiza. La sorpresa que Soraya nos tenía preparada a todos era que iba a desaparecer tras una cortina naranja propia de Houdini. Pues ni la magia consiguió que la extremeña obtuviera más de 23 puntos.

Y las votaciones sieron comienzo. Los nervios se apoderaron de Soraya, ya que hasta que nuestros vecinos andorranos nos dieron 12 puntos, nuestro marcador permanecía a cero. ¿Y Francia? Parece ser que la proximidad territorial no fue suficiente para ablandar los corazones de los franceses y que nos diesen algún punto.
Alexander Rybak, representante noruego, se alzó con el micrófono de cristal en una goleada histórica. Y, en cuanto a Soraya, contradiciendo a su canción: la noche no fue para ella…

martes, 19 de mayo de 2009

Ordenadores... ¿gratuitos?


El pasado martes 12 de mayo, en el Debate sobre el Estado de la Nación, el presidente del gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, expuso una serie de medidas para llevar a España hacia el progreso. Una de estas medidas, de lo más comentadas, fue la de dar a cada alumno de 5º de primaria en adelante, un ordenador portátil gratuito para que los estudiantes empleen tanto en las aulas como en sus hogares. Y la pregunta es: ¿quién va a pagar más de 200.000 portátiles? Pues ya les digo yo que Zapatero no.
Esta maravillosa idea surge en plena crisis económica mundial, pero claro, como España ni tiene desempleados, ni nota los efectos de esta crisis hemos decidido poner a los niños ordenadores gratis para que se entretengan, porque es mucho más práctico invertir en ordenadores, que en aulas y profesorado.Porque claro, si nosotros volviésemos a las aulas y nos pusiesen un ordenador delante en cada clase, seguramente NO jugaríamos al buscaminas o al solitario mientras el profesor explica raíces cuadradas, ¿verdad?

domingo, 10 de mayo de 2009

La gripe


- Aaaaaachuuussss
- Jesús
- Gracias
- Las que tú tienes

Bueno, salvo esta última frase (que quizá oigamos menos de lo que en realidad nos gustaría), este podría ser un diálogo que ocurría con bastante frecuencia en el metro. Y digo ocurría porque las cosas han cambiado. Con la gripe del cerdo (perdón hay que llamarla gripe A para que la gente no deje de comer cerdo) todo es diferente. Si ahora te da por estornudar en el metro o en el autobús la gente sale despavorida como alma que lleva el diablo. Te miran como si te acabases de escapar de la película 12 monos y estuvieses infectado con una enfermedad que va a acabar con toda la humanidad. ¡Bruce sálvanos! Tranquila señora, que sólo tengo alergia. Pero les da lo mismo, por si las moscas se ponen a respirar a través de sus pañuelos a modo de mascarillas creyendo que así van a escapar de la gripe. ¡Ja! Luego van a trabajar, creyendo que están a salvo, sin saber que su jefe se ha ido de "viaje de negocios" con su secretaria a Cancún. Conclusión: han pillado la gripe y aún no lo saben. El virus ya está esparcido por toda la oficina.

Yo mientras,ajena a todo esto, me dedico a medicarme contra la alergia y a tomarme mi actimel (tengo que tener en alerta a mi equipo actimel por si tienen que salir al rescate). "¡Ja!" pensará otro de mí, "se cree que con un actimel va a evitar una gripe que está matando gente".Puede que no, pero a mi reconforta saber que estoy intentando tomar algún tipo de medida para prevenir la gripe.¿Mascarillas?Lo siento, pero hace muchos años que la gente dejó de imitar a Michael Jackson. La única manera posible de que alguien me convenza para ponerme una mascarilla es regalandome unos zapatos a juego. Porque ya me vais conociendo y yo... ¡Antes muerta que sencilla!

miércoles, 22 de abril de 2009

Los domingos de Madrid


Es costumbre madrileña aprovechar las mañanas de domingo para acudir al Rastro de Madrid. Pero no acaba ahí la mañana. Tras subir la cuesta de Rivera de Curtidores hay que reponer el esfuerzo yéndose de cañas por el céntrico barrio de la Latina.

Ya en el siglo XV los ropavejeros (vendedores de ropa usada) y los curtidores de pieles se asentaron en este barrio de las afueras de la Villa de Madrid. A finales del siglo XVIII empezaron a instalarse también vendedores de productos comestibles, tahonas, trastos de todo tipo e incluso objetos robados. Ya en el siglo XIX empezaron a aparecer las tiendas de antigüedades y galerías. En muchas ocasiones, todas ellas infructuosas, se ha intentado cambiar su emplazamiento. Poco a poco El Rastro ha ido asentándose como el mercadillo “oficial” de la ciudad de Madrid.

Ahora, quinientos años después de sus inicios, El Rastro se ha convertido en visita obligada para turistas y viajeros. Cada vez son más numerosos los puestos desmontables que, cada domingo, se instalan. El desorden es una constante en cada uno de estos tenderetes, pero ello hace que la aventura sea más interesante y que el encontrar un objeto de valor entre tanta chatarra resulte casi como encontrar un tesoro enterrado en una isla desierta. Y si encima consigues regatear al vendedor de turno, eso que te ahorras para el aperitivo.

Es curioso observar la variedad de artículos que se venden en El Rastro. Hay puestos que se especializan en la venta de un solo tipo de artículo: ropa interior, cacerolas, gafas de sol, películas, navajas, etc. Otros, por el contrario venden productos muy variados: desde banderas de la República hasta chapas de Britney Spears. Y es que el público que cada domingo recorre la Rivera de Curtidores es de lo más variopinto, y sus gustos también.

Hay que decir que a ciertas horas, especialmente en verano, resulta casi imposible circular por la calle porque la gente se apretuja unos contra otros y puedes tardar casi una hora en recorrer un camino que, en circunstancias normales, no se tardaría más que veinte minutos. Y es ahí cuando ladrones y maleantes se frotan las manos y aprovechan cualquier despiste para robar a los más despistados.

Pero no todo el domingo va a ser comprar. En esta famosa cuesta madrileña también podemos encontrar infinidad de bares y restaurantes para tomarnos alguna tapita y callar al gusanillo que a eso de la una de la tarde te pide el aperitivo. Es ahí cuando se ve la diferencia entre los madrileños y los turistas. Estos últimos prefieren tomarse algo por los bares que están alrededor de los tenderetes, porque están más a la vista y por eso son más caros. El madrileño, que ya se conoce estos truquillos y que está acostumbrado a acudir al rastro con mayor frecuencia, prefiere andar cinco minutos y acudir a las tabernas de La Latina. Nada apetece más en verano que unas cañitas en una terraza mientras se comentan las compras de la mañana.

A las tres de la tarde los vendedores comienzan a recoger sus puestos, mientras algún comprador poco madrugador aprovecha para cerrar sus últimos tratos. A las cuatro la calle vuelve a su tranquilidad habitual, despareciendo la magia y alegría que, cada domingo, nos trae El Rastro.

miércoles, 15 de abril de 2009

El lunes empiezo


Esta es una de las frases que más utiliza una mujer a o largo de su vida. ¿Y refiriéndose a qué? Las féminas lo habrán adivinado a la primera: la dieta. La dieta es el rival de los Mc Donalds, pastelerías y tiendas de chucherías, pero ante todo es mi enemigo público número uno. Aún estoy intentando aguantar más de dos días de régimen. ¿Falta de voluntad? Puede ser, pero sobre todo es que, como dice un amigo mio, "la comida te da tanto y te quita tan poco..."


La sociedad hace que no nos veamos agusto con nuestro cuerpo. Nos obsesionamos con nuestros defectos. Queremos perder peso y queremos perderlo ya. Por eso nos agarramos a un clavo ardiendo y probamos dietas, cremas y aparatos eléctricos, todo ello milagroso (según nos venden). Son famosas la dieta de la alcachofa (de la que Rociíto fue imagen), la del melocotón, la disociada, etc. Son muchos los rostros conocidos de nuestro país que publicitan estos productos. Actualmente "Rosa de España" (ganadora de la primera edición de Operación Triunfo) es la imagen de una crema reductora. Mención aparte merecen los apartos de gimnasia pasiva que anuncian que colocándote los electrodos en el abdomen es como si estuvieses una hora haciendo abdominales. En fin, no hay más ciego que el que no quiere ver, y cuando queremos perder peso a toda costa nos lo creemos todo.


Con el verano a la vuelta de la esquina muchos se apuntan al gimnasio a un mes de las vacaciones para lucir tipín en la playa. Porque año tras año, la gente se apunta en mayo creyéndose que con hacer ejercicio ese mes (y eso si además de apuntarse algimnasio van, no como yo) se te va a quedar un cuerpo de vigilante de la playa que quita el hipo. ¡Error! Os lo aviso porque como aún no estamos en mayo podeis aprovechar el dinero de la matricula del gimnasio para fines más productivos, como por ejemplo ¡COMPRAS! (¿Existe algo más productivo que las compras?)


Además esto no es algo que afecte sólo a las mujeres. Antiguamente puede ser, pero en pleno siglo XXI, con la expansión de los metrosexuales (¿por qué Dios mío, por qué los has creado?) los hombres también se quieren cuidar. Otro amigo me ha comentado que cuando él nota que ha cogido algún kilito de más cuida su alimentacion y hace más ejercicio, pero sólo durante unos días. Ya hace más que yo.


Veréis, mi problema es que cuando intento ponerme a régimen se me agria el carácter. Por eso he decidido, a petición de amigos y familiares que padecen mis cambios de humor, que cuando me someta a esta tortura que es la dieta me voy a ir de retiro espiritual.


Aunque me cueste reconocerlo, debo decir (perdóname Señor Burger King) que la clave está en una alimentación equilibrada y ejercicio moderado, no en hacer una dieta milagrosa durante 15 días. Así que desde aquí me propongo ponerlo en práctica (sois todos testigos). Así cada vez que vea una revista no diré en cada página: "Esta está operada. Esto es photoshop. "

lunes, 6 de abril de 2009

La siesta


Costumbre típicamente española consistente en descansar después de la comida con el fin de reponer fuerzas para continuar el día. El término siesta procede de la expresión hora sexta, que es el período del día que comprende la franja de entre las 12 y las 15 horas.


Pero más allá de una costumbre, la siesta tiene su fundamento científico. Durante la digestión la sangre se concentra en el estómago y de ahí que nos quedemos adormilados. En teoría, los médicos recomiendan entre 20 y 30 minutos de reposo, pero una vez que te quedas dormido a ver quién es capaz de despertarse.


Está demostrado que una siesta que no supere los 30 minutos es beneficiosa para la salud ya que mejora la circulación, favorece la memoria y previene del estrés. Por el contrario, si excede la media hora puede trastocar el reloj biológio y provocar insomnio por la noche.


Yo, cuando me voy a echar la siesta , ya voy mentalizada de que los tres cuarto de hora no me los quita nadie (y si he comido cocido de la hora no bajo). Pero es que yo no me echo la siesta en el sofá y con la mantita, yo me pongo el pijama y me meto en la cama. Vamos, que sólo me falta el gorrito. Porque ya lo decía el Premio Nobel Camilo José Cela: "Hay que hacer la siesta con pijama, Padrenuestro y orinal".


Así que ni el chupa-chups, ni la fregona, ni el futbolín. ¡El mejor invento español es la siesta!

jueves, 2 de abril de 2009

¿Hay vida después del amor?

Tras una ruptura sientes que el mundo se te viene encima. No eres capaz de ver la vida con perspectiva. Todo gira en torno a él. Te encuentras en una encrucijada y no sabes qué camino escoger.

Normalmente, cuando una relación llega a su fin todo el mundo quiere un cambio radical en su vida: cambios de look, tatuajes (o eliminar tatuajes con la inicial del susodicho,eso varía en función del grado de locura de cada una), tirarse a todo lo que se mueve… Cuando llegó ese momento en mi vida tomé mi decisión: cambié de banco. Yo es que tengo que ser rarita hasta en los momentos drásticos. C' est la vie.

En fin, una vez que vuelves a estar soltera (¿cuántas rupturas es capaz de soportar una mujer?) tenemos otro problema: la competencia. Este es un tema muy interesante. Vereis, resulta que cuando los hombres dicen que somos malas y mentirosas no mienten. Basta que una diga que un hombre le gusta para que venga la amiga listilla de turno y se te adelante. (Listillas del mundo perdonadme,no es mi intención ofenderos). El caso es que dentro de un mismo grupo de amigas puede darse la situación de que todas se sientan atraídas por el mismo "elemento" ( y él encantado,claro) aquí es cuando comienzan los problemas. Mujeres recurriendo a su artillería más pesada para hacerse con la presa: escotes infinitos, minifaldas muy muy muy escuetas...todo vale. Esta situación me recuerda a la sabana, cuando un macho domina una manada con ocho hembras. Él se tumba a la sombra y deje que se peleen por él y a copular con todas las que pueda.

La verdad es que cuando una mujer pasa mucho tiempo sin catar varón baraja varias posibilidades: ir de hombre en hombre, hacerse lesbiana, meterse a monja o centrarse en los amigos y adoptar el lema "lo que tenga que venir, vendrá". Personalmente recomindo esta última opción porque es la única que os garantizo al 100% que no va a hacer que os arrepintais.


Féminas, no desfallezcais. Ya lo decía la casi nada operada Cher: “Do you believe in life after love?” ¡Yo sí!

miércoles, 1 de abril de 2009

Dichosos mosquitos


Increíble. Estamos a 1 de abril y me encuentro un mosquito en mi habitación. ¿Cómo es posible que los mosquitos no hayan emigrado a climas más cálidos? ¿Y lo bien que estarían ahora en Punta Cana? Allí ahora es temporada alta. Aquello estará lleno de turistas hasta las cejas de piñas coladas, daikiris y demás bebidas dulzonas de las que estos insectos podrían sacar provecho. Pero no, han decidido que yo soy la elegida.
Desde pequeña siempre he sido el foco de picaduras de mosquitos. Mi madre siempre me decía que era porque soy de sangre dulce (bien puede deberse a que estaba todo el día zampando chucherías). Pero no, con él tiempo he elaborado mi propia teoría. Veréis, igual que nosotros tenemos nuestra pirámide alimenticia con nuestros cereales, alimentos ricos en proteínas y otros productos, los mosquitos tienen un único elemento en esa pirámide. Y vosotros pensaréis, “claro, la sangre”. Pero no amigos, yo conozco ese diagrama alimenticio y en él lo único que aparece es...¡mi nombre! Y, a juzgar por la cantidad de mosquitos que me pican, yo diría que con letras luminosas.
No hay nada que pueda hacer al respecto. Me pican incluso a través de los vaqueros. ¿Cómo lo hacen? ¿Se tratará de una especie avanzada de mosquitos asesinos capaz de atravesar puertas blindadas? No tengo donde esconderme.... Vienen a por mí, y yo estaré esperándoles con un matamoscas en una mano y un after-bite en la otra.

martes, 31 de marzo de 2009

Aventura Mañanera


Martes por la mañana. Son las ocho. Espero en el andén de metro a que llegue mi tren. “Próximo tren llegará en 01 min”, anuncia un panel luminoso. Lo que se le olvida mencionar es que va a llegar hasta arriba de gente y me voy a tener que esperar al próximo tren. “Se siente B”.

No puedo permitirme llegar tarde otro día, así que me armo de valor y, empujón va empujón viene, consigo colarme en el vagón. ¡Qué bonito momento de hermanación! Parecemos salchichas Oscar Mayer envasadas al vacío, salvo por dos diferencias: en vez de paquetes de siete, nosotros formamos un gran paquete de 130 salchichas; la otra diferencia es que las salchichas Oscar Mayer no huelen a una mezcla de sudor, don Simón, tabaco y café. Bastante lógico por otra parte, ya que sino, ¿quién las compraría?

Tras cuatro paradas consigo bajarme en mi estación ilesa, todo un logro si tenemos en cuenta los codazos, empujones y pisotones que he conseguido esquivar. Alguien debería proponerlo como deporte de riesgo, es toda una aventura lo de ir en metro.

Salgo del metro y respiro el aire fresco de la ciudad: contaminación, polen….¡Esto es vida!Me siento bien. Soy una buena ciudadana. El que no me haya sacado el carnet de conducir no es porque sea una negada o una vaga, yo lo hago por el medio ambiente. ¡Soy una eco-girl!

Bienvenidos a mi Blog

¡Bienvenidos a todos!

He decidido empezar un blog para contar al mundo (al pequeño mundo que me lea) lo que pienso, porque , tengo una opinión sobre todo, ¡qué le vamos a hacer! Así que espero poder engancharos poco a poco, y que termineis haciendo de esta web una de vuestras páginas más visitadas porque, al fin y al cabo, ¡SOÑAR ES GRATIS!

Así que poneos cómodos, que empezamos.