jueves, 30 de diciembre de 2010

Despidiendo el año

Otro año que se va. Bye, bye 2010. Willkommen 2011 (que no se diga que las clases de alemán no están sirviendo para nada). Los supermercados están hasta las trancas, las peluquerías no dan abasto y las uvas se venden más que en ningún momento del año (algo curioso cuando no es época de uvas). Esto se debe a que un año hubo excedente de esta fruta y así comenzó la tradición de tomar una uva por campanada. Todo un negocio, por otra parte...

La noche del 31 de diciembre todo el mundo hace lo posible por atraer hacia si la buena suerte. Tangas rojos, oro en las copas para brindar, el pie derecho adelantado en la última campanada... Hay mil y una supersticiones para despedir el año y recibir al nuevo con buena suerte y felicidad. En mi casa tenemos rituales propios de personas que se visten con camisa de fuerzas, pero es que mi madre es un poco bruja (pero buena) y bastante supersticiosa.

Cuando empieza a llegar la gente para la cena de Nochevieja, en mi casa se enciende una vela blanca. Esa vela debe estar encendida toda la noche. Cada uno escribe en un papel tres deseos para el año que entra y los guarda hasta el final de la noche. Después de la última campanada, y de todos los brindis, besos y abrazos que acompañan a dicho momento, cada uno quema su papel en la vela blanca. El papel se tiene que quemar entero porque sino no se cumplen los deseos. ¿Qué, alguien había oído hablar de este ritual? Pues en mi casa es tradición.

Sé que en la mayor parte del mundo la gente acostumbra a llevar ropa interior roja para que les de buena suerte. Pero en mi casa, esa noche hay que tener algo verde que te toque el cuerpo. Valen calcetines, ropa interior, pulseras... Mientras te toque el cuerpo vale. Muchas veces se nos olvida ponernos algo de este color así que nos ponemos un trocito de laurel, perejil o algo verde dentro del sujetador o el calcetín. (No digáis que no os he avisado que eramos un poco raritos).

Os animo a que pongáis en práctica mis "hechizos" y a que compartáis los vuestros. A ver si entre todos damos con el truco perfecto para ser todos muy felices el próximo año. ¡FELIZ 2011 A TODOS! Espero que paséis una noche mágica.

sábado, 25 de diciembre de 2010

Feliz Navidad

¡FELIZ NAVIDAD A TODOS! A todos aquellos a los que les visita Papá Noel, espero que haya convertido todos vuestros sueños en realidad, y si no es así, no os pongáis triste, ¡que aún faltán los Reyes!

Disfrutad el día, sobre todo si tenéis niños en casa, porque hoy es un día mágico para ellos.


miércoles, 22 de diciembre de 2010

La lotería de navidad

Un año más los niños de San Ildefonso esperan nerviosas a cantar el premio gordo de la Lotería de Navidad. Los españoles esperábamos este día con mucha ilusión. Yo ya había empezado a hacer cábalas de lo que haría si resultase premiado mi décimo.

Para empezar me compraría una casa, que imagino que es lo que haría prácticamente cualquier persona de 25 años que aún vive con sus padres. Luego me haría un viaje por Nueva York, Argentina, Australia o China. Y la verdad es que si te paras a pensarlo tampoco es tanto dinero:300.000 euros. ¡Ojo!, que yo no me quejo, pero que 300.000 euros no te permiten retirarte.

Así que, esta mañana he estado navegando en Internet desde el trabajo para mantenerme informada de los premios que iban saliendo y cuando ha salido el gordo… ¡Horror! El 79.250. Se han debido equivocar, porque yo tengo otro número… Pero no, no se han equivocado. No me he llevado ni las migajas… Así que toda esa ilusión que tenía al empezar el día se evaporado como por arte de magia.

Hay que decir que este año está muy repartido el primer premio: Molina de Segura (Burgos), Alicante, Madrid, Saldaña (Palencia), Barcelona, Zaragoza, Alcorcón (Madrid), Cerdanyola del Vallés (Barcelona), Barcelona, la estación de Chamartín (Madrid), Cáceres y Eibar (Guipúzcoa), pero debe ser que se les ha debido olvidar repartir algo conmigo (aún estáis a tiempo).

Ivan Quintero y Andreas López son los afortunados niños que se han desgañitado gritando “setenta y nueve mil doscieeeeeeentos cincuentaaaaaaa” “tres milloooones de eeeeeuros”.

El segundo premio (un millón de euros) ha recaído en el número 00147. Personalmente me parece un número feísimo, puede tener algo que ver que tampoco me haya tocado a mí. De todas formas aquí os dejo apuntado los premios más importantes para que consultéis a ver si habéis tenido más suerte que yo y os ha tocado algo. Eso sí, si os ha tocado, invitarme a unas cañas, ¿no?

¡Que la suerte os acompañe!

  • EL GORDO: 79.250
  • 2º PREMIO: 00147
  • 3er PREMIO: 75.913
  • 4os PREMIOS: 57.896 y 25.506
  • 5os PREMIOS: 75.869 , 73.684 , 77.992 , 69.069 , 34.141 , 15.548, 06.075, 78.953

Sinceridad vs Mala educación

Aunque mucha gente crea lo contrario, no por ser sincero se debe ser maleducado. La sutileza es una cualidad de la que muchos carecen. Si yo tuviese una amiga que tuviese un poco (o mucha) pelusilla en la zona del bigote no se me ocurriría decirle: “Oye Groucho, ¿hacemos algo está tarde?”. La cogería aparte y le diría de la manera menos brusca posible que tiene un problema de bello facial que es muy fácil de solucionar. Y todos tan contentos. Y lo haría así porque es lo que me gustaría que hiciesen conmigo en una situación de este tipo.

Y es que todos estamos expuestos cada día a multitud de situaciones que nos pueden poner en esta tesitura: se te queda comida entre los dientes, se te ha olvidado quitarte la etiqueta al estrenar el modeluki, al sonarte los mocos te dejas algo en la nariza, te manchas el bigote con la leche…

El problema está en que muchas de estas de estas personas que se creen abanderados de la sinceridad buscan la risa y los aplausos de los presentes, aunque ello suponga dejar en ridículo a otra persona a la que incluso, a lo mejor, aprecian.

¿Entonces, qué hacemos con ellos? ¿Utilizamos el ojo por ojo? Desde luego se lo merecen, pero eso haría que nosotros cayésemos también en las redes de la mala educación. Así que ante sus ataques de sinceridad lo único que podemos hacer es contraatacar con comentarios mordaces e irónicos sin caer en golpes bajos.

Y como dice mi abuela: “Ande yo caliente, ríase la gente.

lunes, 20 de diciembre de 2010

Unos crían la fama y otros cardan la lana



Cuando vi este anuncio de Movistar me di cuenta de que el niño tenía razón. Y no por el hecho de que las ovejas sean fundamentales en un belén, que lo son, sino porque siempre se llevan los aplausos los mismos. Este anuncio es una metáfora perfecta de la vida.

Yo no sé si es algo que ocurre en todos los trabajos (intuyo que sí) pero al menos en el mío siempre pringamos los mismos: los últimos monos de la empresa, los que no tenemos ni voz ni voto, pero luego el mérito y los aplausos son para otros. Esos otros son los enchufados del jefe, los que se tiran al jefe, los que a su vez son jefes de otros y se limitan a mandar a diestro y siniestro sin dar ni palo al agua… En fin, toda esa clase de personas que nos hace preguntarnos “¿Pero cómo ha llegado ese tío dónde está?”.

Pero, ¿qué sería de las empresas sin los que de verdad trabajamos? ¿Quién sacaría adelante el trabajo? ¿Acaso los jefes últimos no se dan cuenta la clase de ineptos que tienen a su cargo? ¿No suponen que el trabajo se lo hacen los que están detrás? Pues parece ser que no.

Así que mientras esto siga así siempre pringaremos los mismos. Por lo menos el niño del anuncio ha unido fuerzas y ha conseguido que las estrellas de la obra sean, por una vez, los actores secundarios.

domingo, 19 de diciembre de 2010

Annie, el musical

Este año Papá Noel se ha adelantado en mi casa y le ha traído a mi madre un regalo de mi parte: dos entradas para Annie, el musical. Así que ayer por la tarde nos fuimos las dos juntas a disfrutar de su regalo.

Tras 33 años de éxito mundial, 7 premios Tony, 3 premios Grammy, y con más de 2.400 representaciones durante 6 años en Broadway, la pequeña Annie llega a Madrid.

Annie es una huérfana de 11 años de edad. Vive en un orfanato junto a otras niñas, con la esperanza de encontrar a sus padres, mientras la malvada Miss. Hannigan las amenaza y maltrata constantemente.

Este musical está en principio dirigido a niños, pero eso no quiere decir que los adultos no puedan disfrutar en la misma medida de él, igual que ocurrió con La Bella y la Bestia. La diferencia es que en esta ocasión, además de estar dirigido a niños, está protagonizada por ellos. Niños que no deben tener más de 13 años y que ya están hechos unos artistas de la cabeza a los pies.

Lo cierto es que esta obra me ha dejado un poco fría. Es entretenida pero no tiene nada de especial. Los decorados son mediocres, las coreografías dejan mucho que desear y las interpretaciones se veían un poco forzadas. Las voces de los actores son muy buenas pero en el caso de las niñas aún son muy jóvenes y no las controlan lo suficiente ni saben darle los matices adecuados.

En mi humilde opinión es un musical que no se merece mi recomendación y menos aún si tenemos en cuenta la gran variedad de obras mucho mejores que se representan en España.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Caperucita en Manhattan, de Carmen Martín Gaite

Cuando terminé de leer Mientras escribo no supe qué atacar después. Me di un paseo por el salón para ver que me encontraba y resulta que no había nada. Como a mis padres sólo les gusta leer en verano y Semana Santa pues se han llevado todos los libros a la playa. Y entre semana no tengo tiempo de ir a la biblioteca a coger nada. Algunos (los que no conocen el término "crisis") pensarán: "¡Pues cómprate uno, agarrada!" Ojalá pudiera. No hay cosa que me guste más que comprar y que me regalen libros, pero al precio que están no puedo comprarme un libro cada semana, así que sólo invierto en aquellos que me gustan de verdad.

El caso es que rebuscando entre los pocos libros que quedaban desperdigados por mi casa encontré Caperucita en Manhattan. Este libro se lo mandaron leer a mi hermano en el colegio cuando era pequeño (ahora él tiene 27 años) y obviamente nunca lo hizo. Durante años he visto el libro en su cuarto pensando "un día me lo tengo que leer". Y ese día ha llegado.

Se trata de una obra infantil, según dice la autora "de ocho a ochenta y ocho años". Está ambientado en Nueva York al final de los años ochenta. Yo no diría que es la versión moderna de Caperucita pero tenemos los mismo personajes: la abuelita, una niña como Caperucita y el señor lobo, pero son muy diferentes de los del cuento de toda la vida. Una vez más, al igual que en La elegancia del erizo, tenemos como protagonista a una niña de unos 10 años con un gran mundo interior y mucho más inteligente que la mayoría de los adultos que la rodea.

Se trata de una historia muy cortita y fácil de leer que me ha entretenido entre libro y libro. Recomiendo que lo compréis como regalo navideño o de cumpleaños a algún primo, hermano o sobrino de entre ocho o diez años, si es que aún no han perdido la inocencia, porque con los tiempos que corren... Siempre se lo podéis tomar prestado cuando no tengáis nada qué leer...

jueves, 16 de diciembre de 2010

Tarjeta Roja al Maltratador

Ayer, mientras debía estar estudiando para mi examen de alemán, vi un ratito un especial de Carmen Ordóñez que estaban poniendo en Telecinco. Contaban la vida y milagros de Carmina La Divina, incluyendo el tema de los malos tratos. Pero cotilleos aparte, cuando recordaron que un juez no siguió adelante con la denuncia por malos tratos porque no encajaba en el “perfil sociológico de mujer maltratada” se me heló la sangre. ¿Es que acaso para ser mujer maltratada hay que tener un perfil concreto? ¿Qué pasaría si la duquesa de Alba fuese una mujer maltratada? Según este juez, probablemente no serviría de nada que lo denunciase porque el perfil de duquesa no casa con el de maltratada. ¡Menuda chorrada!

Imagino que para estas mujeres tomar la decisión de denunciar al maltratador es muy duro. El esfuerzo de ir a una comisaría a poner una denuncia podría suponer otra paliza para ellas (quizá la última), pero aún así lo hacen. ¿Pero de qué sirve si no les dan ni la oportunidad de contar lo que ha ocurrido ante un juez? Luego pueden declarar inocente al acusado, pero lo mínimo que se les debe a estas mujeres es el derecho a expresarse.

Por eso quiero unirme a la causa “Saca Tarjeta Roja al Maltratador”. No es posible que a las puertas de 2011 la principal causa de muerte entre las mujeres de entre 15 y 44 años sea la violencia de género. Hay que acabar con el maltrato.

lunes, 13 de diciembre de 2010

Mientras escribo, de Stephen King

Un día, estando de cañas con mis amigas, les comenté que me gustaría apuntarme a un curso que me enseñase a escribir con el fin de llegar a ser algún día como J. K. Rowling. A la semana, mi amiga la marmota, que lee mucho y escribe genial, me trajo un libro de Stephen King. Al principio yo no lo entendí muy bien, no recordaba haber hablado de Stephen King con ella, pero luego me dijo que este libro me daría algunas pistas para ir empezando a escribir.

Yo nunca había leído nada de este autor. Me sorprende hasta a mi misma porque creo que en mi casa tengo varios de sus libros, pero nunca me había sentido atraída por el tipo narrativa que podríamos englobar en el género de terror. El caso es que Mientras escribo no tiene nada que ver con sus demás obras.

King empieza con una especie de Curriculum Vitae en el que nos cuenta sus primeros pasos en el mundo de la narrativa y como ha ido evolucionando. A continuación nos da una serie de herramientas para poder escribir: consejos y errores en las que nunca debemos caer (amigos de los adverbios, lo siento mucho, pero debéis desterradlos de vuestra escritura). El libro termina con la historia de lo que le sucedió a Stephen King mientras escribía esta obra y con una selección de los libros que él ha leído en los últimos años.

La historia de su vida me enganchó desde el principio. Al pobre King le ha ocurrido de todo. No quiero desvelaros mucho pero yo he descubierto cosas que no imaginaba de él. En cuanto a los consejos de escritura obviamente puedes cogerlos o no, yo intentaré hacerlo. Me ha gustado su forma de expresarse clara y sin tapujos. Este libro hace que quieras escribir en todo momento, y cuando no puedes hacerlo estás pensando en sobre qué escribir. Recomiendo Mientras escribo a todos aquellos que, como yo, sientan el gusanillo de la escritura pero no sepan cómo coger al toro por los cuernos. No hay que temer al fracaso. Como dice King “Tú puedes hacerlo, debes hacerlo y, si tienes la valentía de empezar, lo harás”.

jueves, 9 de diciembre de 2010

La vergüenza de este país

Viernes 3 de diciembre. La gente lleva tiempo planeando sus vacaciones. ¡Por fin, el puente más largo del año! Aprovechando que los viernes la gente sale antes de trabajar, ya desde la mañana se podía ver a muchos con su maleta. Pero no pudo ser.

No pudo ser porque el viernes todos los controladores aéreos se pusieron enfermos. ¡Fíjate tú que casualidad! Les habrá dado una indigestión a todos de comer caviar gracias a los sueldos astronómicos que les pagamos todos los españoles. ¡Ah no! Perdón, que cobran poco.

Y es que lo mires por donde lo mires lo que han hecho es ilegal. ¿Que tienen derecho a hacer huelga? Correcto, pero deben avisar con antelación. Lo que no se puede hacer es aducir enfermedad. ¿Qué tienen estrés? Más estrés tienen los parados que no saben cómo sacar adelante a sus familias.

Los aeropuertos de Madrid, Barcelona, Canarias y Baleares se colapsaron. El gobierno pidió a los ciudadanos que no se acercasen a los aeropuertos, que los aviones no iban a salir. Por primera vez en la democracia española el gobierno tuvo que decretar estado de alarma.Tuvo que intervenir el ejercito.

No puede ser que unos funcionarios tengan el poder de paralizar todo un país. No puede ser que en época de crisis la gente no arrime el hombro. El “como yo estoy jodido voy a joder a los demás” no nos lleva a ninguna parte.

Para más inri el presidente de la Unión Sindical de Controladores Aéreos, Camilo Cela, declaró que los controladores "son una plantilla muy castigada". Que en los tiempos que corren tenga yo que escuchar que un tío que cobra 200.000 euros al año pertenece a un colectivo castigado es un delito y así es como tienen que ser juzgados, como delincuentes.

¿Quién va a hacer frente a todas las perdidas que esta situación ha provocado? Pues probablemente el gobierno, es decir, nosotros. ¿Cómo va a hacer frente a tales cantidades? He ahí la pregunta del millón. Como España está boyante vamos a tirar el dinero porque a cuatro malnacidos se les ha puesto en las narices. ¿Y qué pasa con la imagen de España? Un país que vive del turismo no puede permitirse el lujo de tener sus aeropuertos cerrados. Es una vergüenza, esta gente no sólo se merece el escarnio público sino penas de cárcel, sanciones económicas y todo lo que sea necesario para evitar que esta situación vuelve a ocurrir. Y si hay algún médico que haya firmado bajas por estrés a diestro y siniestro que se le juzgue también. Ya está bien de que siempre sea el consumidor el pardillo que paga por todo.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Alemán A1


Os voy a dar el mejor consejo que nadie os va a dar en vuestra vida: NUNCA, jamás de los jamases, bajo ningún concepto, pase lo que pase, os apuntéis a alemán. Insisto, NUNCA. Sé de lo que os hablo.

Este año he empezado a estudiar este idioma, en realidad no llevo más que un par de meses, pero me encuentro perdida entre sonidos que jamás había oído. Yo en realidad me quería apuntar a portugués, pero no había plazas, así que no me quedó más tutía. Bueno, para ser sinceros, el alemán era mi segunda opción, porque el año pasado estuve de viaje en Alemania para visitar a unas amigas Erasmus (si os acordáis fue allí donde me atrapó la nube de ceniza) y me gusto mucho Berlín, me gustó mucho ver a mi amiga la marmota hablar ese idioma tan extraño con una fluidez pasmosa y me gustó la idea de verme a mi misma hablando alemán.

El caso es que voy a clase y no me entero de nada. Veo que mis compañeros progresan y yo no sé ni lo que me preguntan. El día 16 tengo un examen, ya veremos como me sale... Ayer mi profesora, a la que creo que no le caigo muy bien y aún no sé el motivo, dijo una frase que define a la perfección la complejidad de este idioma: "Bueno, es que la "R" es medio-vocal". ¿Perdona? ¿Cómo que medio vocal? De toda la vida las vocales han sido a, e, i, o, u. Aquí y en Pekín. Imaginaos la cara que se me quedó. Y es que entre que declinan los verbos, los nombres, los pronombres y prácticamente todo lo indeclinable, y que hay verbos regulares, irregulares y "medio-irregulares" yo no me aclaro. Y eso que sólo voy por el tema 3...

Ahora lo pienso y me da mucha pena que ninguna amiga me dijese en su día: "¿Pero qué estas diciendo alma de cántaro, cómo vas a aprender alemán con 25 años? ¡Que es muy difícil!" Pero bueno, agradezco también el apoyo y los ánimos que me prestaron cuando les comenté que me iba a apuntar a clases de alemán, a pesar del escepticismo que, imagino, todas sentirían por dentro.

Por eso yo os lo aviso ya. NO LO HAGÁIS. ¿Que os vais a vivir a Alemania? Pues habláis en inglés. ¿Qué os casáis con alguien de esa nacionalidad? Pues que aprenda español. ¿Que vuestro trabajo depende de que aprendáis el idioma? Ya habrá otro trabajo mejor esperándoos. Hacedme caso y no os pasará como a mí, que salgo de clase preguntándome qué estaría pensando yo cuando decidí apuntarme a Alemán...

martes, 30 de noviembre de 2010

El corazón helado, de Almudena Grandes

Cansada de tener que acudir cada dos por tres a la biblioteca para coger libros, ya que no puedo permitirme comprarme dos libros al mes (por favor que fomenten la cultura bajando los precios de los libros, que es una vergüenza lo caros que son), decidí pedirle algo que leer a la madre de mi novio (a la que no conozco). Ella lee mucho y tiene muchos libros en casa así que pensé que podría prestarme algo interesante.

Cuando mi novio apareció con El corazón helado, he de reconocer que me sorprendió, porque nunca había oído hablar de él, ni de su autora, Almudena Grandes. Pero de primeras me atrajo; me refiero a la portada. Ya sé que no debería guiarme por ellas a la hora de elegir mis lecturas, pero no puedo evitarlo, porque casi nunca me leo el resumen del argumento y empiezo los libros sin tener la menor idea de lo que tratan.

Desde el momento en que empecé a leer el libro (no debía de haber leído más de 10 páginas) ya estaba deseando escribir la crítica en B-Moments, porque desde el principio descubrí que Almudena Grandes tenía un estilo que casaba perfectamente con mis gustos. Pensaréis que he tardado mucho en leérmelo, y tenéis razón , pero es que entre el trabajo, el gimnasio, las clases de alemán y todo no he tenido tiempo para leerme las 930 páginas que lo forman. Pero anoche lo terminé.

Julio Carrión muere al principio de la obra, pero su fantasma planeará encima de sus hijos, en especial de Álvaro, a lo largo de cada capítulo. Julio Carrión fue uno de los tantos que se enriqueció tras la guerra civil, y tras su muerte saldrán a la luz los secretos que este hombre quiso enterrar para siempre.

Guerra, amor, muerte, traición, odio... Esta novela tiene de todo. Podría considerarse un Romeo y Julieta contemporáneo: dos personas que se quieren pero que por ser familia de quien son su amor está abocado al fracaso.

Como os comentaba, leer a Almudena Grandes ha sido todo un descubrimiento para mí (últimamente me paso el día descubriendo). Sus descripciones son exquisitas, su manejo del vocabulario...No tengo palabras. Estoy deseando leerme otra de sus novelas.

Así que os recomiendo a tod@s esta lectura. Una pequeña obra de arte para regalar y que te regalen estas navidades.

lunes, 29 de noviembre de 2010

El copo perfecto

Oh, the weather outside is frightful,
But the fire is so delightful,
And since we've no place to go,

Let it snow, let it snow, let it snow...

Mira que os lo avisé: ¡Ya es navidad! Y como en toda buena película navideña que se precie los copos de nieve ya han hecho su aparición. Hoy ha amanecido como cualquier otro día, muy frío, eso sí. Yo no contaba con que nevase. De hecho he llegado a trabajar y ni rastro de nieve. Pero a eso de las 11 de la mañana ha empezado a nevar y aún no ha parado (y son las cinco de la tarde).


Es curioso que a la gente le guste tanto la nieve cuando en realidad no tiene nada bueno. Cuando está recién cuajada es muy bonita, deja estampas propias de postales navideñas, pero a la que te descuidas ya es todo barro pisoteado que no provoca más que resbalones y mancha los bajos de los pantalones. Supongo que gusta por su rareza, porque yo el año pasado, que en Madrid nevó durante un par de semanas, estaba ya harta de nieve.

Mi compi de trabajo, que es medio alemana, se ríe mucho de lo poco preparados que estamos en España para este fenómeno meteorológico. Y tiene razón. Las carreteras se colapsan, los aviones no despegan, los cercanías no circulan... Ya ves tu, con lo fácil que es tomar ciertas medidas preventivas que son fáciles de implementar y que nos harían a todos la vida más sencilla. Pero claro es que en Alemania están acostumbrados a que nieve día sí día también. ¡Y España es famosa por el sol y la sangría, no por el abominable hombre de las nieves!

Pero bueno, hoy os quiero hablar de mi nuevo descubrimiento. Seguro que muchos de vosotros ya lo sabíais y pensaréis que soy un poco "lenta" pero yo creí que era algo que sólo ocurría en los dibujos animados, no en la vida real. Pues bien, mi compañera, la alemana, me ha dicho: "Quiero que nieve en forma de estrella". A lo que yo le he contestado: "Sí claro, y yo en forma de corazón". Pero resulta que ella tiene razón. Aunque yo nunca lo haya visto, y no sepa que ley física hace posible este fenómeno, es cierto. ¡¡Los copos de nieve en forma de estrellita existen!! ¿Vosotros lo sabíais? Yo creí que era un recurso gráfico que se utilizaba para representar la nieve, pero no. Estoy muy contenta con mi nuevo descubrimiento y me voy a pasar todo el invierno a la caza del copo de nieve perfecto. ¡La freaky que hay en mí contraataca!

martes, 23 de noviembre de 2010

Dulce Navidad

Desde el día 1 de noviembre es Navidad para mí. No es que yo sea una exagerada, las señales están ahí, sólo tenéis que buscarlas.

Uno de los indicativos de que la Navidad ya está aquí es el puesto de churros que ponen todos los años en Manuel Becerra y el puesto de castañas asadas también ocupa ya su lugar habitual. Esa es la señal que cada año me indica que se acercan las fiestas. El circo también ha llegado a la plaza de toros de las ventas. Seguro que más de uno piensa que soy una exagerada y que esto no son más que señales de que el invierno está aquí de nuevo. Pues no, es la Navidad, y os lo voy a demostrar.

Antes del día 1 de noviembre, que en Madrid fue fiesta, los operarios de la ciudad comenzaron, como cada año, a colocar las luces navideñas que alumbraran las calles de la capital. ¿En octubre? Eso mismo pensé yo, pero al parecer sino luego no les da tiempo a colocarlas todas. Hace también ya un par de semanas que mi novio me trajo también el catálogo de juguetes del Corte Inglés. ¡Qué maravilla! ¿Quién decidió que a partir de cierta edad no debe uno pedirse juguetes? ¿Ese alguien sabe los que es el barco pirata de Playmobil o los Nenucos? Yo creo que no, porque sino todos estaríamos pidiendo juguetes estas navidades.

Me imagino que mis razones os seguirán pareciendo escasas. Ya estoy imaginando a alguno decir: “Eso es una campaña de las tiendas para que empieces a gastar antes”. Y yo no digo que no, pero el hecho es que en el Corte Inglés de Goya ya han puesto un Cortilandia en la plaza de Felipe II, aunque por supuesto aún tampoco está en funcionamiento. Los escaparates ya están decorados con motivos navideños, los restaurantes ya tienen las agendas hasta arriba de reservas de cenas navideñas, los anuncios de juguetes acaparan las pantallas todos los sábados por la mañana, los niños ya han empezado a escribir sus cartas a los Reyes y mi madre ya me ha comprado mi calendario de adviento (que no podré empezar hasta el 1 de diciembre). Ahora sí, ¿no? ¿Os convencéis de que ya es Navidad?

Seguro que vosotros también tenéis vuestras propias claves que os indican que las fiestas ya han llegado. ¿O soy yo la única loca fanática de la navidad? Perola culpa no la tengo yo, porque llamándome Belén no se podía esperar otra cosa...

domingo, 21 de noviembre de 2010

El principio del fin


Viernes. Siete de la tarde. ¡Ya ha llegado el día! Después de mucho tiempo esperando, por fin ha llegado el estreno de Harry Potter. Como os comenté en el post anterior soy bastante freaky de Harry Potter, así q tenía las entradas compradas con unos 15 días de antelación, e hice bien.

El cine estaba hasta arriba. Había niños con sombreros de magos, no tan niños con bufandas de Griffindor y Slitherin, y yo nerviosita perdida. Pero antes de poder disfrutar de la película me iba a tener que enfrentar a un ligero contratiempo.

Mis amigas y yo llegamos al cine y nos pusimos a buscar nuestras butacas, pero cuál fue nuestra sorpresa cuando vimos que había otra gente sentada en ellas. Comprobamos que sus entradas tenían asignados los mismos asientos y avisamos a un empleado del cine. El chavalín hizo todo lo posible para que nos quedásemos nosotras con los asientos porque teníamos las entradas desde antes y además sus entradas estaban compradas en internet y las nuestras en taquilla, pero los susodichos se negaban a moverse. El cine estaba hasta arriba y nosotras ya nos veíamos viendo a Harry sentadas en las escaleras… Al final todo se solucionó, nos reubicaron en otra fila a las cinco juntas y nos devolvieron el dinero que habíamos pagado, así que se puede decir que fuimos al estreno de la séptima entrega de Harry Potter by the face (o por la patilla, como prefiráis).

Hace ya mucho que me leí el libro (cuando salió a la venta). He perdido la buena costumbre de releerme el libro antes de ver la película, así que casi fui al cine de nuevas, como si nunca me hubiese leído el libro. Pero según iba viendo avanzar la película yo iba recordando. Debo reconocer que la película está muy bien cortada (porque ya sabéis que el último libro de Harry Potter ha sido adaptado al cine en dos películas) porque quizá si se hubiese alargado un poco la primera parte el espectador se habría quedado con más intriga a la espera de la siguiente entrega. No quiero dar muchos detalles para los que no se hayan leído los libros pero esta primera parte es más una puesta en situación que otra cosa, el bacalao se partirá en la segunda parte. He echado en falta más acción, ya que se me ha hecho un poco lenta, pero espero con ansia el final de la saga.

Por cierto quería comentaros un detalle que me ha llamado la atención y me ha hecho mucha gracia. Snape, el personaje que nunca se termina de saber si es bueno o malo y que esta vez apenas aparece, se ha hecho un cambio de look. Ha sustituido su look de pelo grasiento en la cara al que nos tenía acostumbrados por un peinado a lo Ángeles de Charlie más propio de Farrah Fawcett que del enigmático profesor de Hogwarts.

Pero, ¿qué será de mi cuándo todo haya acabado? ¿Hay vida tras Harry Potter? Para colmo se me va a juntar con el final de la saga Crepúsculo. Está visto que los disgustos (¿o eran las desgracias?) nunca vienen solos…

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Freaky like me

Esta canción de Madcon que últimamente no para de sonar en mi ipod (como podéis ver en la aplicación que aparece a la derecha de este texto) parece mandarme mensajes subliminales a todas horas del día. Vale Madcon, cogido, yo también soy una freaky.

Y es que, en el fondo, todos somos bastante freaks cuando algo nos gusta. Yo soy una persona bastante radical, un todo o nada que podríamos llamar; así que cuando algo me gusta lo llevo hasta el extremo. Así que funciono a rachas. Hace un par de años me dio por las calaveras, los que me conocéis lo recordaréis: zapatillas, orejeras, pañuelos, broches, diademas… Hasta que un día me cansé.

A día de hoy me considero freaky de varias cosas: Harry Potter (de esto ya os hablaré la semana que viene porque el viernes voy al cine a ver la primera parte de la séptima película), Crepúsculo, Sexo en Nueva York, Friends… Pero no os asustéis, no me disfrazo de Hermione Granger o de Bella Swan para ir por las calles; simplemente devoro los libros, me lanzo de cabeza a ver las películas o veo las series una y otra vez.

En realidad una de mis mayores freakeces son las series en general. Estoy enganchada. Antes me veía de golpe en un día 18 episodios. Pero ahora, entre el tiempo que me quita el trabajo y las restricciones de nuestro querido Megavideo, estoy mucho más comedida. Aún así sigo las siguientes series:

  • Modern Family
  • 90210
  • Gossip Girl
  • Hellcats
  • 30 Rock
  • Fringe
  • Anatomia de Grey
  • Glee
  • The Vampire Diaries
  • Cougar Town
  • Brothers & Sisters
  • Greek
  • One Tree Hill
  • How I met your mother
  • Drop Dead Diva
  • Melrose Place
Poquitas, ¿eh? La culpa de todo la tiene mi novio, porque yo al principio veía sólo The O.C y One Tree Hill y desde que le conozco no hace más que enseñarme series nuevas a las que me engancho con una facilidad pasmosa. Encima él ahora va mucho más lento que yo viéndolas y no tengo con quien comentarlas… A eso se le añade que mis amigas, que han estado de Erasmus, se han enganchado a varias series nuevas que también me han comentado.

Conclusión: tengo un máster en series americanas. ¿Soy freaky o no? No hace falta ni que contestéis, que ya sé que lo soy. ¿Y vosotros? ¿De qué sois realmente freakys?

martes, 16 de noviembre de 2010

Pastillas contra el dolor ajeno

Hoy os quiero proponer una acción solidaria, se llama Pastillas contra el dolor ajeno. Ya están a la venta en las farmacias de toda España estas pastillas “mágicas” (en realidad son caramelos mentolados) que en lugar de curar al que las toma cura a millones de personas que no pueden acceder a los medicamentos.

Médicos sin fronteras pone a la venta estas pastillas por 1€ y con el dinero que recauden se tratará a millones de personas que sufren enfermedades menos comunes como el chagas, el sida infantil, la enfermedad del sueño, la malaria, etc. Estas enfermedades apenas tienen repercusión en nuestra sociedad, pero en el tercer mundo mueren diariamente personas a causa de ellas porque las empresas farmacéuticas quieren hacer negocio con los medicamentos y los ponen a un precio que obviamente las personas pobres no pueden pagar.

Así que no hay excusa, es sólo 1€ que para nosotros no es nada y puede cambiar la vida de millones de personas. Pensad que es el dinero que os gastaríais en una bolsa de patatas, unos chicles, un billete de autobús… Recordadlo la próxima vez que entréis en la farmacia. Además es un regalo que podéis añadir a los amigos invisibles estas navidades.

Quiero aprovechar también para pediros a los que tenéis blogs o canales de youtube o cualquier plataforma que llegue a mucha gente que difundáis esta información. Si os da pereza, copiad y pegad este texto que he escrito yo, no me importa, lo importante es que llegue a mucha gente.

Os dejo aquí la página web:

www.msf.es/pastillascontraeldolorajeno/

lunes, 15 de noviembre de 2010

Yo de mayor quiero ser…

Desde que somos pequeños ya pensamos en lo que queremos ser de mayores: astronautas, futbolistas, bailarinas, profesoras… Sueños que generalmente quedan muy lejos de la función que luego desempeñamos en la vida. Yo no recuerdo qué quería ser de pequeña, probablemente cada mes quería ser algo distinto, lo que os puedo garantizar es que no quería escribir noticias sobre trenes…

El caso es que últimamente me gusta preguntarle a la gente en qué les gustaría trabajar realmente. Y las respuestas dan mucho que pensar: ingenieros que quieren ser cocineros o escritores, publicistas a las que les gustaría ser maquilladoras.... Porque, ¿a cuánta gente le hace feliz su trabajo? Pero feliz de verdad. Imagino que son pocos los afortunados, y les envidio por ello.

Yo no tengo muy claro qué es lo que a mí me llenaría, qué trabajo debería desempeñar para que no me importe hacer horas extra o madrugar para trabajar. Yo creo que a mí me gustaría ser escritora. Escribir una saga de novelas tipo Harry Potter que gustan tanto a niños como a mayores. Pero últimamente he empezado a pensar que también me gusta mucho leer, así que quizá estaría bien lo de trabajar en una editorial. No lo sé. Es algo difícil porque además, tal y como está la situación laboral en estos momentos uno no puede permitirse el lujo de elegir.

Pero los que no tenemos que pagar alquileres, hipotecas, dodotis o colegios aún podemos permitírnoslo, debemos luchar por conseguir nuestro sueño. No debemos dejar que el niño pequeño que quería ser veterinario deje de intentar serlo. Mirad en vuestro interior y preguntaos: “¿Yo qué quiero hacer realmente con mi vida?” Porque el problema es que muchas veces ni siquiera sabemos lo que queremos y vamos por la vida dando bandazos. ¡Ánimo a todos! Luchad por vuestras ilusiones, que nunca es demasiado tarde.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

No soy vieja, soy retro

Hola tengo 25 años y soy una vieja. A aquellos que sean mayores que yo está afirmación les dará risa, pero es cierta. Obviamente no soy de la tercera edad pero ya noto el paso del tiempo como lo puede notar alguien 20 años mayor que yo.

El otro día viendo el catálogo de juguetes de El Corte Inglés (sí amigos, ya es navidad) vi el Monopoly RETRO. ¿Cómo que retro? ¡Pero sí a esto jugaba yo cuando era pequeña! Pues bueno, ya no es sólo el Monopoly. Ahora se llevan mucho los relojes Casio, porque vuelve la moda retro. ¡Retroleches! Cuando yo era pequeña y nos aburríamos en clase jugábamos con el cronómetro del reloj al fútbol. Era algo así como que si conseguía parar el cronómetro cuando las centésimas de segundo eran ceros se consideraba gol. (¡Qué imaginación!) Algunos tenían el modelo con calculadora (porque era indispensable ir con una calculadora a todas partes, nunca se sabe cuando te van a pedir que halles una raíz cuadrada) y los más afortunados tenían un reloj que funcionaba como un mando a distancia y que volvía locos a los profesores cuando teníamos vídeo. Así que bueno, se puede decir que en lugar de vieja soy retro.

El caso es que me paro a pensarlo y ya no me recuperó igual de las resacas. Antes podía salir dos días de fiesta, ahora un día de fiesta equivale a dos días de resaca… También lo noto cuando veo a mis vecinos. Niños que yo he visto de recién nacidos ahora magrean a sus novias por los rincones. ¿Y la comida? Comiendo lo mismo engordo el doble. ¿Cómo es posible? ¡Pero si sólo tengo 25 años! Esta crisis no debería llegarme hasta los 30. Pero claro, la manía que tiene el Consorcio de Transporte de Madrid de decirte que cuando cumples 21 años dejas de ser joven (y por tanto debes pagar el doble por el abono transporte) tampoco ayuda.

El día menos pensado le digo a alguna amiga. “¿Ves eso? Antes todo eso era campo.” El día menos pensado, fijaos bien lo que os digo. Porque ya suelto frases del tipo “Es que las niñas de ahora son unas golfas”. Creo que de mayor seré una abuelita cascarrabias parecida a Doña Rogelia que pondrá el dedo tieso y gritará “¡Cojona!” Así que aviso a todos los veinteañeros que se creen que tienen una vida entera por delante, aprovechad bien, que cuando llegas a los 25 empieza la cuesta abajo.

domingo, 7 de noviembre de 2010

A carcajada limpia con Avenue Q


Este fin de semana he ido al teatro a ver el musical Avenue Q. Si os digo la verdad, cuando compré las entradas no sabía muy bien de qué iba la cosa. Para que no os pase lo mismo que a mí os voy a poner en situación.

Avenue Q es un barrio de Nueva York en el que conviven muñecos y humanos. Un día llega al vecindario un recién licenciado lleno de ilusiones que busca su meta en la vida. Los personajes de este musical tratan los temas del sexo, el racismo y la homosexualidad sin tapujos y al ritmo de pegadizas canciones como “Que mierda ser yo”. Estos son los personajes interpretados por Ángel Padilla, Inma Mira, Pablo Muñoz-Hápuli, Thauis Curia, Mayka Sitté, Julián Fontalvo y Noemi Gallego Valverde:

Rod:
el reprimido.
Nicky: el compañero de piso de Rod y está desempleado.
Princeton: se acaba de mudar al barrio.
Kate Monster: su sueño es abrir una guardería para pequeños monstruos.
Trekkie Monster: es un monstruo que no se relaciona y que es adicto al porno.
Lucy La Guarra: supongo que de su apellido podéis deducir su personalidad.
Ositos de las Malas Ideas: esta pareja va siempre junta y llevan a todos por el mal camino.
Srta. Potorro: es la jefa de Kate.
Brian: aspirante a humorista sin pizca de gracia.
Merry Christmas: esta japonesa es la novia de Brian.
Gary Coleman: el niño-actor que se hizo famoso por interpretar a Arnold es el chapuzas del barrio.

A mí me encantó este musical, no paré de reírme y me pareció algo nuevo y original. El personaje de Gary Coleman es desternillante, el típico niño prodigio que triunfó en Hollywood y al que sus padres le han robado su fortuna.

Esta obra lleva triunfando en Broadway desde 2003 y ha sido galardonada con tres premios Tony, arrancando carcajadas en más de medio mundo (Australia, Rusia, Israel, Francia, Hungría, Brasil, Suiza, México, Italia, Filipinas, Argentina, y por supuesto, Londres).

Quiero destacar la interpretación de Inma Mira quien hizo tanto de Lucy La Guarra como de Kate Monster; pasando de una voz sensual y desgarradora a una completamente dulce. Tiene una voz muy potente y encandiló al público con sus actuaciones.

Os recomiendo a todos que no os perdáis este musical en el Teatro Nuevo Apolo (en Tirso de Molina). Hay entradas para todos los bolsillos (de los 15 a los 42€) de modo que el precio no es una excusa para no verlo.

Atención: NO ES PARA NIÑOS. Lo digo porque había alguno que otro en el teatro.

Os dejo un link a un video resumen:

http://www.youtube.com/watch?v=lgdwHKE3F6g