La maleta roja

Hace no muchos años, las mujeres se reunían en casas para celebrar las "Tupperware Parties". Este fenómeno fue especialmente fructífero en Estados Unidos, pero se extendió también por Europa. Desde que en 1948 se celebrara la primera reunión de Tupperware los tiempos han cambiado mucho y los productos se han ido adaptando a los cambios. Hoy por hoy, apenas se celebran reuniones para vender esos productos y el Tuppersex ha revolucionado el concepto.

El viernes pasado, una amiga mía decidió celebrar un Tuppersex por su cumpleaños, así que llamó a La Maleta Roja. Nos reunimos 13 amigas en una casa y cenamos mientras esperábamos la llegada de Cristina, nuestra "asesora". Cuando llegó, arrastraba una maleta roja con ruedas que yo rápidamente apodé de la maleta del pecado. Y no me equivocaba.

Cristina fue un encanto. Nos sentamos todas en círculo y nos pasamos los productos mientras ella nos explicaba todo con muchísima naturalidad. Juguetitos a pilas, aceites para masajes, antifaces, velas... Lo cierto es que había mucha variedad e incluso las menos atrevidas encontraron algo de su interés. Al llegar el momento de comprar nos volvimos todas un poco locas. ¡Era muy difícil elegir! Al final casi todas nos llevamos algo a casa.

Quiero recalcar que cuando llamas a La Maleta Roja no te cobran por celebrar la reunión ni te obligan a comprar un mínimo. Eso es lo bueno de estas reuniones, en realidad compras porque te apetece, no porque te sientas forzada a ello. También quiero deciros que aunque estos productos son un poco caros hay cosas desde 10€ así que hasta las que aún sois estudiantes os lo podéis permitir. ¡Ah! Y se puede pagar con tarjeta.

Yo os lo recomiendo a todas las que queráis pasar una noche divertida y diferente con vuestras amigas. Os animo a que paséis antes por la tienda online de La Maleta Roja porque en ella hay unos 300 productos y la asesora sólo lleva en su maleta unos 25, pero todo lo que veáis en la web se lo podéis encargar a ella y os ahorráis los gastos de envío. Todos los productos que queráis y que no tenga en ese momento con ella os los enviará (de manera muy discreta) unos días después. Así que animaros todas, porque es una experiencia que yo repetiría.